Riego del brócoli
Si hay un cultivo hortícola cuya superficie cultivada no deja de crecer año tras año, ese es el brócoli y en este post intentaremos daros las claves sobre los mejores sistemas de riego del brócoli. España es el primer productor de Europa de Brócoli, con una producción anual aproximada de 500.000 toneladas y una superficie cercana a 30.000 hectáreas. Seguido muy de lejos por Polonia cuya superficie cultivada es de 8.000 hectáreas. La producción española se destina a la exportación en un 90%, principalmente a Reino Unido. Aunque el consumo español va aumentando paulatinamente a medida que se van dando a conocer los beneficios de esta hortaliza para la salud.
Diversos estudios indican que los vegetales del género brassica en general, y el brócoli en particular, tienen efectos protectores frente al cáncer, dado su contenido en compuestos bioactivos como glucosinatos, flavonoides, vitaminas y minerales.
El brócoli es un cultivo rústico y fácil de llevar. Su germinación se realiza en semillero durante aproximadamente un mes. Cuando las plantas alcanzan unos 15 – 20 cm se trasplantan al campo donde, dependiendo de la variedad permanecen entre 70 y 100 días, hasta completar el ciclo de cultivo. La diversidad de variedades tempranas o tardías permite el cultivo del brócoli durante todo el año.
Es un cultivo de temperaturas suaves, aunque se adapta muy bien a las bajas temperaturas, tolerando una gran amplitud térmica entre las temperaturas diurnas y nocturnas.
Respecto al tipo de suelo, como todas las crucíferas, prefiere suelos con tendencia a la acidez y no a la alcalinidad, estando el óptimo de pH entre 6,5 y 7. Tiene una buena tolerancia a la salinidad. Requiere suelos de textura media, con capacidad de retención de agua, pero con buena aireación, ya que no tolera los suelos encharcados.
El adecuado manejo del riego del brócoli es fundamental en este cultivo, ya que las plantas de brócoli requieren una humedad prácticamente constante, pero sin encharcar el suelo.
Además, tras la inflorescencia no se recomienda el riego por aspersión para evitar la aparición de hongos, por lo que el sistema más adecuado para el riego del brócoli es el riego por goteo.
Según la zona de España, las técnicas de cultivo varían. Por ejemplo en Extremadura es habitual plantar una línea de plantas de brócoli en bancadas de 1,5 m de ancho con una separación entre plantas de 50 cm. Por cada hilera de plantas se dispone una línea de goteo.
En Murcia, sin embargo, un marco de plantación habitual sería en caballón a 90 cm entre filas y 25 cm entre plantas. Siendo las densidades de plantas más habituales de 40.000 – 45.000 plantas por hectárea.
Para el riego por goteo se recomienda instalar DripNET® con goteros de 0,6 o 0,4 l/h con una separación de 30 – 50 cm según las características del suelo y el marco de plantación o MiniTody® Plus de 0,72 – 0,8 l/h.
Para determinar las necesidades hídricas del brócoli se deben calcular las necesidades brutas del cultivo, que es la cantidad de agua que el cultivo necesita para su desarrollo óptimo. Estas necesidades de riego del brócoli se calculan a partir del valor de la evapotranspiración del cultivo. El valor de evapotranspiración del cultivo es la suma del agua que transpira la planta durante sus funciones biológicas de desarrollo y el agua que se evapora del suelo. Debido a la dificultad de cuantificar ambos valores por separado, se estiman conjuntamente, de ahí el término evapotranspiración. Para permitir un buen desarrollo del cultivo este es el volumen de agua que se debe ir reponiendo mediante el riego o la lluvia.
Para saber qué volumen de agua debemos aplicar con el riego se deben calcular las necesidades netas, calculadas como diferencia entre las necesidades hídricas brutas y los aportes naturales de agua, es decir, la lluvia.
La evapotranspiración del cultivo se obtiene a partir de la evapotranspiración de referencia para unas condiciones climáticas determinadas, corregida mediante un coeficiente característico de cada cultivo, denominado coeficiente de cultivo Kc, que depende la fase de desarrollo del cultivo y que representa las variaciones de la cantidad de agua que las plantas extraen del suelo a medida que se van desarrollando.
Fuente: FAO – Evapotranspiración del cultivo. Guías para la determinación de los requerimientos de agua de los cultivos.
Los valores de evapotranspiración de referencia para cada zona geográfica se pueden encontrar en diversas webs y aplicaciones que distintos organismos públicos ponen a disposición del usuario, tales como:
Murcia – Extremadura – Aragón – Cataluña – Castilla y León – Castilla La Mancha – Comunidad Valenciana – Andalucía – Navarra
Para el cultivo del brócoli el coeficiente de cultivo es:
Fuente: FAO – Evapotranspiración del cultivo. Guías para la determinación de los requerimientos de agua de los cultivos.
En las primeras fases de crecimiento los riegos deberán ser abundantes y regulares, mientras que en las fases de inducción floral y desarrollo de la pella se pueden espaciar más los aportes de agua en el riego del brócoli, siempre y cuando se mantenga el estado de tempero del suelo.