Riego de la cebolla por goteo, ¿es el referente?
Entre las actividades agrícolas de mayor crecimiento, se destaca el riego de la cebolla. Según el Ministerio de Agricultura, en España se cosechan más de un millón de toneladas anuales de esta planta hortícola. Además, existen más de 20.000 hectáreas cultivadas que están distribuidas principalmente por Castilla La Mancha, y también en otras comunidades autónomas como Castilla y León y Andalucía.
La cebolla es un cultivo sensible y, por lo tanto, requiere del mejor sistema de regadío. Tradicionalmente, el riego de las cebollas se realizaba en surcos. Sin embargo, estos métodos requerían de una gran cantidad de agua y el porcentaje de eficiencia de riego no era el adecuado. En consecuencia, se optó por elegir otro sistema de regadío como el riego por goteo.
Desde Regaber queremos destacar algunas características de la reina de las verduras. Asimismo, indicaremos la importancia que tiene el riego por goteo en el cultivo de la cebolla.
El cultivo de la cebolla: algunas características
La cebolla es un bulbo comestible que crece en la planta del mismo nombre. Se trata de una hortaliza de la familia de las Liliaceae, que se caracteriza por su estructura de un diámetro entre los 3-10 cm.
El interior de la cebolla está conformado por capas gruesas donde se acumulan sus principales nutrientes. Estas capas están protegidas por membranas secas y delgadas con tonalidades blancas, amarillentas y rojizas.
El cultivo de las cebollas comienza desde la plantación de las semillas hasta la obtención de la planta. Para disponer de un cultivo eficiente, los agricultores deben tener en cuenta algunas características técnicas. De este modo, se sacará el máximo rendimiento al cultivo.
Los principales factores que afectan el riego de la cebolla son:
El clima
Por lo general, el cultivo de la cebolla se realiza en climas templados y cálidos. La planta crece entre los 15 y los 30 grados de temperatura. Su temperatura óptima es de 25 grados.
Además de una temperatura suave, la cebolla necesita de los rayos del sol. Por esa razón, se recomienda su cultivo en los meses de primavera y verano.
El suelo
Antes de sembrar la cebolla, los agricultores deben preparar el terreno de cultivo. El objetivo es airear el suelo y quitar todos los terrones de tierra que afectan el crecimiento del cultivo.
Hay que tener en cuenta que el cultivo de esta planta debe realizarse en un suelo profundo. La razón para elegir este terreno es que la parte comestible (el bulbo) necesita que el suelo esté aireado y descompactado.
¿Por qué el riego de la cebolla por goteo es el mejor sistema?
A diferencia de otros sistemas de cultivo, el riego por goteo es una solución más eficiente para el cultivo de cebollas. Este tipo de riego localizado no solo evita los estancamientos de agua, también dosifica el recurso hídrico, con el objetivo de evitar usos irracionales.
El riego por goteo logra una maduración más rápida y uniforme entre los bulbos de la cebolla. En concreto, el Streamline® X garantiza un óptimo riego y fertirrigación para las hortalizas de temporada.
Por otro lado, el riego por goteo permite un mejor secado de las catáfilas externas, que son las partes protectoras de la planta. De ahí que reduce las enfermedades poscosecha.
El riego por goteo disminuye la aparición de las siguientes enfermedades en la cebolla:
- Botrytis o moho gris
- Fusarium
- Sclerotinia
- Aspergillus
Otra característica a favor del riego por goteo es que favorece la absorción de nutrientes. Esto debido a la aplicación de agua de forma localizada. Como resultado de este proceso, se optimiza la absorción de la solución nutritiva por la planta. Además, evita pérdidas por bloqueo de nutrientes en el suelo.
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