Día Mundial del Medio Ambiente
En Regaber queremos que el día mundial del medio ambiente sea una excusa para recordarnos cómo seguir realizando nuestro trabajo cada día, con el objetivo de contribuir a un uso más eficiente de los recursos y a una agricultura más sostenible.
Desde 1980 estamos trabajando por y para la innovación en las soluciones de riego y fertirrigación, buscando la eficiencia en todos los elementos de las infraestructuras relacionadas con el riego, desde la captación en origen hasta la última gota aplicada a cada planta.
La calidad y la precisión de los sistemas que ofrecemos, junto con la experiencia acumulada, es la clave para ir avanzando en el aumento de la productividad del agua para cada cultivo, es decir, la cantidad de cosecha producida por cada metro cúbico de agua empleado.
También, con el paso del tiempo, hemos buscado la disminución en la presión de funcionamiento de los diferentes equipos: filtros, goteros, aspersores, … con el objetivo de conseguir una importante disminución en el consumo energético.
En relación al ahorro de agua, los goteros de ultra bajo caudal, han cambiado la concepción del riego. Ha quedado patente la importancia de la adecuada distribución de goteros en relación al tipo de suelo y al sistema radicular del cultivo. En la actualidad, se ha conseguido que el agricultor ya no busque siempre el mismo caudal de gotero a la misma distancia, sino que sabe que dispone de una amplia gama de caudales y separación de goteros, que conjuntamente con un adecuado manejo del riego, le permiten conseguir importantes ahorros de agua y de energía.
Además, con la aparición de la agricultura digital, se ha abierto un gran abanico de posibilidades en el desarrollo de herramientas para la ayuda a la toma de decisiones. El Big Data en agricultura ya es un hecho. Estas tecnologías nos permiten recoger, monitorizar y analizar una gran cantidad de datos. Desde sensores instalados en campo, hasta datos meteorológicos, imágenes satélite, datos compartidos por diferentes organismos, … Todos estos datos, analizados y comparados con modelos específicos para diferentes cultivos, y teniendo en cuenta nuestras técnicas de cultivo, fase fenológica, tipo de suelo, previsiones meteorológicas, … permiten a los sistemas de Big Data dar las recomendaciones de riego y fertirrigación para los próximos días. De este modo se consigue ajustar el riego y la fertirrigación a las necesidades reales de cada explotación.
Este riego inteligente, también va a ser clave en la optimización del uso de los recursos, siendo cada día más eficientes en la producción agrícola y, por lo tanto, colaborando en la protección del medio ambiente.