La importancia de la filtración en los sistemas de riego
Los sistemas de riego por goteo y de microaspersión requieren de una filtración adecuada para funcionar de manera óptima y fiable. En función de la calidad o problemática que presente el agua deberemos optar por un sistema de filtrado diferente.
Sabiendo de dónde viene el agua de riego, se puede diseñar correctamente la filtración del sistema. Si tenemos presencia de materia inorgánica (sobre todo de arena) debemos optar por un hidrociclón combinado con el filtro de anillas Arkal®; en presencia de materia orgánica (por ejemplo algas) se debe optar por un filtro de arena acompañado por filtro de mallas Amiad®, en cambio, en presencia de limo debemos instalar filtros de arena. Para los casos más graves deben instalarse filtros de anillas y de arena o bien sistemas de decantación.
Independientemente del tipo de filtración, cada vez más se recomiendan los sistemas automáticos de filtración que permiten la limpieza automática de los propios filtros. Hoy en día gracias a la evolución de la tecnología de filtración, se puede usar el agua de cualquier origen para agricultura. Ya sea con presencia de arena, agua salada, algas y otros materiales sedimentos, podemos detener todos los elementos que supongan un riego de obstrucción de los emisores con el tiempo.
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