Según la NASA el agua dulce escasea y su distribución está cambiando
Recientemente la NASA ha publicado un estudio en el que los investigadores han reunido datos de 14 años de observaciones de GRACE, una misión espacial germano- estadounidense, que rastreó las tendencias globales de agua dulce en 34 regiones del planeta.
También se incluyeron datos de precipitaciones a nivel global, imágenes satélite (de Landsat), mapas de irrigación y otros resultados de estudios científicos relacionados con la agricultura, la minería y las reservas de agua.
Los resultados en el estudio concluían que las regiones húmedas se están volviendo más húmedas y las secas más secas, debido a diversos factores como el uso del agua en sectores como industria, agricultura y minería.
Estos cambios auguran un futuro en el que los recursos hídricos ya limitados llegarán a ser incluso más escasos. Aumentan las precipitaciones en latitud norte y disminuyen en latidudes medias, donde además se ejerce una mayor presión en el uso del agua. Además la desigual distribución de este recurso genera tensiones e inestabilidad política, migración y conflictos.
En la conservación de este preciado recurso, los datos aportados por GRACE motivan a las naciones a colaborar entre ellas y también a adoptar políticas que incentiven la conservación del agua para evitar una tragedia por la disponibilidad de este recurso.
En muchas regiones, el riego de los cultivos a escala masiva extrayendo agua de los acuíferos es totalmente insostenible. No puede seguir a ese ritmo por el agotamiento de los propios acuíferos, el crecimiento de la población y el calentamiento global.
El conocimiento de la disponibilidad cambiante del agua dulce es el primer paso para abordar los desafíos discutidos aquí a través de unas mejores infraestructuras , una mayor eficiencia en el uso del agua, estilo de vida y decisiones y políticas de gestión del agua.
Para ello las futuras misiones de teledetección vía satélite serán clave en la observación hidrológica mundial y en la evaluación de la disponibilidad cambiante del agua dulce.
FUENTE: https://www.nature.com/articles/s41586-018-0123-1.pdf
Emerging trends in global freshwater availability
La FAO recomienda la mejora de las técnicas de riego para combatir la escasez de agua
El consumo de agua en la agricultura representa el 70% del consumo de agua dulce del planeta. Es evidente que ante problemas globales de escasez de agua y de una distribución irregular de los recursos hídricos, las indicaciones y políticas deben centrarse en mejorar los sistemas de riego como medida de ahorro de este importante recurso.
Varios estudios internacionales, así como estudios recientes en Francia, demuestran que el rendimiento de las prácticas y los equipos de riego, especialmente en la uniformidad de la aplicación del agua, es aún demasiado bajo.
Esto se debe a que los agricultores carecen de las habilidades de gestión para gestionar sus sistemas de riego de manera adecuada. Las consecuencias incluyen reducciones en el rendimiento de los cultivos y un desperdicio de recursos hídricos.
Para mejorar el rendimiento de riego, es necesario no solo promover la implementación de métodos de programación de riego, sino también mejorar el diseño y el rendimiento del sistema y mejorar las habilidades de los agricultores para controlar y gestionar su sistema de riego de manera más eficiente durante su operación.
Para las tres principales técnicas de riego (riego superficial, riego por aspersión y riego por goteo), se enumeran las dificultades que tienen un efecto negativo significativo en el rendimiento del riego. Las soluciones incluyen, por un lado, seleccionar la técnica más adecuada para el cultivo y utilizar equipos certificados que cumplan con los estándares pertinentes y que puedan garantizar una calidad mínima y, por otro lado, implementar métodos de gestión actualizados para tales equipos y técnicas, y el desarrollo de habilidades para evitar los errores que se producen actualmente durante el funcionamiento ordinario del sistema.
La búsqueda de una mejor utilización del agua de riego agrícola, que es crítica en períodos de escasez, ha llevado a buscar métodos para cuantificar su distribución, en fecha y en volumen, de acuerdo con los requerimientos de agua de las plantas. Estos requisitos se estiman a partir de varias técnicas de programación.
La programación del riego define «cuándo» es necesario regar un cultivo y «la cantidad» de profundidad de aplicación del agua que se debe entregar. Una vez que se ha elegido la profundidad de aplicación de agua de riego adecuada, utilizando los métodos de programación, un agricultor debe transportar el agua a cada planta en la fecha requerida y con la precisión y uniformidad requeridas.
La gestión de los sistemas de aplicación de agua en el campo constituye un problema complejo al que los agricultores se enfrentan diariamente. A menudo es un cuello de botella importante para la implementación eficiente y el desarrollo a gran escala de prácticas avanzadas de programación de riego.
Para obtener ahorros sostenibles de agua, será obligatorio requerir un grado mínimo de calidad técnica para los sistemas y transferir a los usuarios un verdadero dominio en el manejo del agua en sistemas de riego, permitiendo así las pérdidas de agua resultantes de la heterogeneidad en la distribución de agua a controlar.
Para la mejora de las técnicas de riego debemos tener en cuenta:
· La calidad del equipo de riego debe considerarse como un punto importante (certificación por los organismos aprobados). El problema es aún más crítico cuando se realiza fertirrigación.
De hecho, esta técnica requiere una muy buena uniformidad de distribución y técnicas precisas de programación de riego, pero no se implementaría sin riesgo para la producción de cultivos si el desempeño del sistema evoluciona negativamente con el tiempo;
· Monitoreo del sistema, mantenimiento preventivo y curativo, incluida la implementación de métodos para evaluar y controlar el rendimiento real del sistema en el campo. La posible automatización de esta técnica ahorra mano de obra y facilita la implementación de técnicas precisas de programación de riego.
Como conclusión, es necesario abordar a escala global políticas de gestión correcta del agua. En todos los sectores y usos pero principalmente en la agricultura.
Estas políticas de gestión del agua deben basarse en un ahorro y en un mejor uso de este recurso.
Investigaciones recientes muestran la programación del riego como una condición necesaria para mejorar el rendimiento de riego agronómico y económico. Sin embargo, por sí solo no es suficiente y la mejora concurrente de los equipos de riego en el campo y de las habilidades de gestión de los agricultores es indispensable.
Los procedimientos para obtener resultados mejorados a largo plazo de los sistemas de riego se pueden abordar con un método de análisis clásico de «calidad global del sistema» (calidad de equipos, calidad del sistema de riego y calidad en los procedimientos.
Hacerlo permitirá a los agricultores obtener mayores beneficios del uso de técnicas de programación modernas y, por lo tanto, mejorar el rendimiento general del riego (rendimiento económico y agronómico, reducción de las aguas residuales, etc.).
FUENTE: http://www.fao.org/docrep/w4367e/w4367e0d.htm#TopOfPage
Surface irrigation management in real time in southeastern Australia: Irrigation scheduling and field application